Las cinco cruces - Los otros crucificados con Cristo en el Gólgota


La visión tradicional acerca de la crucifixión muestra a Jesús junto a dos ladrones, uno a cada lado. Sin embargo, existen ciertos problemas con este punto de vista, pues existen diferencias importantes entre los relatos de los Evangelios. Según Mateo y Marcos, los dos ladrones se burlaban e injuriaban a Jesús (Mateo 27:44; Marcos 15:32). En tanto Lucas indica que uno solo se burlaba de Jesús mientras el otro lo defendía (Lucas 23:39-40). Esta discrepancia ha sido un argumento recurrente de los que atacan la Biblia, afirmando que ella no es confiable puesto que presenta ciertas contradicciones.

Algunos, con la intención de responder esto, han dicho que ambos ladrones crucificados injuriaban a Jesús en un principio, pero que más tarde uno de ellos se habría arrepentido y le habría pedido perdón a Jesús. Sin embargo, las palabras con las que injuriaba a Jesús son incompatibles con las palabras que le diría más tarde. Los que pasaban mirando y los sacerdotes y levitas injuriaban a Jesús diciéndole: "Tú que derribas el templo, y en tres días lo reedificas, sálvate a ti mismo; si eres Hijo de Dios, desciende de la cruz." (Mateo 27:40). Se burlaban de la condición de Jesús, y mucho más acerca de decir que era el "Hijo de Dios". Era imposible que un ladrón le dijera estas palabras, y a los minutos más tarde creyera que Jesús era el Mesías, llegando hasta pedirle que le considere en su reino (Lucas 23:40-42). Nada podría haber cambiado su mentalidad en la cruz, y mucho menos, viendo a Jesús siendo crucificado como él. 

Pero nuevos estudios profundos acerca de la Palabra de Dios están revelando la verdad. Si bien existen muchas pinturas que describen el Gólgota con tres cruces, existe una representación muy antigua en una Iglesia en Ploubezere (Les Cinq Croix), cerca de Lannion, en el Norte de Inglaterra, donde se representa la Calavera (Gólgota) con cinco cruces, la que habría replanteado la idea de cuántas cruces hubieron en realidad en los hechos relatados en los Evangelios.





Una lectura muy cuidadosa de los cuatro relatos de los evangelios revelan que hubieron dos "malhechores" y dos "ladrones", que no son las mismas personas y que no fueron crucificados al mismo tiempo. La palabra "malhechor" no es lo mismo que "ladrón". Los evangelistas lo dejaron en claro al utilizar palabras distintas. Lucas usa la palabra "malhechores" (kakoúrgos), mientras que Mateo y Marcos usan la palabra "ladrones" (lestai). Esta diferencia es importante, puesto que la Biblia menciona dos crucifixiones en distintos tiempos: dos malhechores y luego dos ladrones.

En el relato de Lucas se puede observar que Jesús fue acompañado de dos malhechores desde el lugar donde fue sentenciado hasta el Calvario, siendo crucificados a la misma hora y antes de ciertos sucesos:


"Llevaban también con él a otros dos, que eran malhechores, para ser muertos. Y cuando llegaron al lugar llamado de la Calavera, le crucificaron allí, y a los malechores, uno a la derecha y otro a la izquierda. Y Jesús decía: Padre, perdónalos, porque no saben lo que hacen. Y repartieron entre sí sus vestidos, echando suertes. (...) Había también sobre él un título escrito con letras griegas, latinas y hebreas: Este es el Rey de los Judíos." Lucas 23:32-34,38

Este punto es importante, puesto que se nos menciona que después de ser crucificado Jesús y los dos malhechores, repartieron sus vestiduras y pusieron un título sobre su cabeza con la causa de la condena. Ahora, Mateo y Marcos (15:24-27) relatan que, luego de ocurridos estos hechos, traen a otros dos para ser crucificados, esta vez dos ladrones:

"Cuando le hubieron crucificado, repartieron entre sí sus vestidos, echando suertes, (...) Y sentados le guardaban allí. Y pusieron sobre su cabeza su causa escrita: Este es Jesús, el Rey de los Judíos. Entonces crucificaron con él a dos ladrones, uno a la derecha y otro a la izquierda." Mateo 27:35-38

La palabra "entonces" indica los dos ladrones fueron crucificados después de los hechos relatados por Mateo, no al mismo tiempo. Hay que tener en cuenta que Lucas tuvo el fin de "escribir por orden" los hechos ocurridos (Lucas 1:1-3). Entonces, juntando ambos relatos, se puede entender que hubieron cuatro malhechores, dos de ellos condenados por ladrones, y que fueron crucificados dos a la izquierda y dos a la derecha, y Jesús en medio.


El Evangelio de Juan, a pesar de que no fue escrito con la intención de ordenar los hechos en forma temporal, revela otros detalles importantísimos. Juan comenta sobre el Gólgota:

"Y allí le crucificaron, y con él a otros dos, uno a cada lado, y Jesús en medio." Juan 19:18

Este versículo da a entender que sólo hubieron dos aparte de Jesús crucificados. Lo cierto es que en el original, la palabra "uno" no está en el griego. La frase "uno a cada lado" viene del griego "enteuthen kai enteuthen". Siempre esta frase griega se traduce "a cada lado" tal como se le usa en Apocalipsis 22:2, cuando se menciona que el árbol de la vida estaba "a uno y a otro lado" del río. Juan, por lo tanto, escribe que en el Gólgota habían crucificados "otros dos a cada lado, y Jesús en medio." Es decir, habían cuatro más con Jesús, dos a su lado (derecho) y otros dos a su lado (izquierdo).

Pero otro detalle relatado por el mismo Juan es muy interesante y complementario. Cuando Jesús estaba crucificado y como era el día de la preparación, los judíos pidieron a Pilato que les quebrasen las piernas a los crucificados para bajarlos antes del día de reposo. Entonces Juan entrega un tremendo detalle:

"Vinieron, pues, los soldados, y quebraron las piernas al primero, y asimismo al otro que había sido crucificado con él. Más cuando llegaron a Jesús, como le vieron ya muerto, no le quebraron las piernas." Juan 19:32-33

Los soldados quebraron las piernas al primero. Si sólo habrían tres crucificados, y Jesús en medio, entonces el siguiente al que le quebrarían las piernas sería a Jesús. Sin embargo, Juan relata que, después del primero, le quebraron las piernas a otro. La Biblia nos dice que "cuando llegaron a Jesús", indicando que él era el tercero en fila y no el segundo. Pero también sabemos que Jesús estaba al medio de la crucifixión (Mateo 27:38; Marcos 15:27; Lucas 23:33; Juan 19:18). Esto da grandes luces de la escena de la crucifixión, puesto que antes de Jesús habían dos crucificados y después de él otros dos más, en total cuatro.

La palabra "otro" usada en este versículo viene del griego "allos". Los griegos usaban dos palabras para referirse a "otros". Una era "heteros", que se refiere a "otros", de sólo dos personas, mientras que la otra era "allos", que se refiere a "otros", más de dos personas, tal como se lo usa Lucas al referirse a los "otros" malechores que iban con Jesús (Lucas 23:32). Si Juan usó la palabra "allos" es porque se refiere a que habían "otros", más de dos y diferentes de Jesús, a los cuales les quebraron las piernas por orden de Pilatos. Si Lucas usó la palabra "allos" para referirse a los malhechores, es porque relata que habían "otros" malhechores, más de dos.


Si fueron cuatro y no dos, entonces es posible afirmar que los últimos crucificados, los ladrones, ambos injuriaban a Jesús (Mateo 27:44; Marcos 15:32). Pero los que habían llegado primero con Jesús, los malhechores, uno injuriaba a Jesús y el otro lo defendía (Lucas 23:39-40). Se entiende que de los cuatro, uno de los malhechores no injurió a Jesús, puesto que lo conocía. Sabía muy bien que lo habían condenado a pesar de que no había cometido ningún crimen (Lucas 23:41). Probablemente había conocido su ministerio en Israel y de sus milagros, puesto que creía que era el Mesías y que tenía reino (Lucas 23:42).